¿Qué es la inestabilidad emocional y por qué ocurre?

La inestabilidad emocional es una alteración que afecta a muchas personas y que dificulta el manejo de las emociones y los pensamientos. Además, también puede suponer un problema importante para la salud y el bienestar de la persona dando lugar a situaciones y conductas de riesgo. Fluctuar varias veces al día entre distintas emociones contrapuestas como la tristeza, la alegría, el enfado o la motivación puede ser desgastante tanto para el/la paciente como para su entorno cuando no se comprende lo que está sucediendo. La inestabilidad emocional resulta muy frustrante para aquellas personas que no entienden por qué ocurre o qué les está pasando. Si este tema te interesa, en el artículo de hoy veremos en profundidad qué es y por qué ocurre la inestabilidad emocional.

¿Qué es la inestabilidad emocional?

La inestabilidad emocional es una alteración de la gestión de las emociones que se caracteriza por presentar cambios de estados emocionales bruscos y sin motivo. Quienes padecen inestabilidad emocional suelen experimentar fluctuaciones demasiado  rápidas y frecuentes en sus emociones, pasando de la euforia a la tristeza en cuestión de minutos, a menudo sin una razón aparente o por motivos que no justifican la intensidad de la reacción. Esta inestabilidad no sólo dificulta las dinámicas de la vida cotidiana, sino que además también puede afectar a las relaciones con los demás y provocar, a largo plazo, problemas de autoestima y de bienestar mental y general para la persona.

¿Cómo identificar los síntomas de la inestabilidad emocional?

Si piensas que tú o alguien de tu entorno podría estar sufriendo de inestabilidad emocional, es importante que aprendas a identificar una serie de síntomas para poder comenzar a elaborar mejor las emociones.

Síntomas de la inestabilidad emocional

El mayor síntoma para detectar la inestabilidad emocional es la alternancia brusca entre la tristeza y la euforia en cortos periodos de tiempo a lo largo de un mismo día. También es frecuente experimentar una falta de motivación profunda o apatía generalizada seguida de un momento eufórico en el que la persona se siente capaz de lograrlo todo. Esto llega a provocar mucha confusión interna e impide una buena autopercepción de uno mismo. Sin embargo, existen otra serie de síntomas que nos pueden ayudar a detectar este problema:

  • Intolerancia a la frustración

La mayoría de pacientes que presentan inestabilidad emocional, encuentran también ciertas dificultades a la hora de manejar la frustración en su día a día. Esto puede causar abandono de los objetivos y metas personales, irritabilidad y sensación de decepción profunda tanto con uno mismo como con los demás. La baja tolerancia a la frustración es frecuente en niños y adolescentes, pero cuando el problema persiste en la edad adulta puede ser necesario el abordaje psicológico.

  • Irritabilidad y/o agresividad

Asociado a los sentimientos de frustración se detectan reacciones agresivas o respuestas de irritabilidad de las que en muchas ocasiones los pacientes con inestabilidad emocional no son capaces de dar cuenta.

  • Baja autoestima e inseguridad

En relación con esto, también es frecuente que la persona se muestre insegura y con una baja autoestima producto del desequilibrio emocional, siendo muy frecuente la búsqueda de validación por parte del exterior o la inacción por miedo al fracaso. Por otro lado, se suelen sufrir sentimientos de falta de sentido vital y de vacío intenso.

  • Relaciones inestables

Muy a menudo, las personas con inestabilidad emocional encuentran serias dificultades para mantener vínculos estables y relaciones interpersonales sólidas. Los cambios de humor repentinos y la falta de seguridad generan conflictos en el entorno familiar, de amigos y de la pareja.

  • Comportamientos impulsivos

Por último, es muy normal que las personas con inestabilidad emocional presenten al mismo tiempo comportamientos impulsivos que podrían poner en riesgo su salud física y mental. Destaca aquí el abuso de sustancias, los contactos sexuales de riesgo o algunas conductas autolesivas. En pacientes jóvenes se ha detectado una tendencia a las conductas de escape, que se realizan de forma compulsiva o abusiva con la finalidad de evadirse de las sensaciones y emociones que les resultan especialmente difíciles de procesar.

Según un estudio de la revista Borderline Personality Disorder and Emotion Dysregulation, la inestabilidad emocional es un rasgo clave en trastornos como el Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) y se asocia con dificultades en la regulación emocional y en la toma de decisiones (Carpenter & Trull, 2013).

¿Cuáles son las causas de la inestabilidad emocional?

Definir las causas de la inestabilidad emocional es una tarea compleja, ya que en cada paciente pueden ser diferentes. Aún así, se encuentran ciertas características comunes y factores que pueden colaborar a que se padezca este problema.

Factores genéticos y otros problemas de salud mental

Se ha estudiado que las/los pacientes que presentan Trastorno Límite de la Personalidad (que se caracteriza precisamente por la inestabilidad emocional) cuentan con frecuencia con algún antecedente familiar con la misma condición. Así mismo, sufrir otros problemas de salud mental como pueden ser la ansiedad, la depresión o el trastorno bipolar contribuyen a padecer alteraciones emocionales  que pueden provocar cambios intensos en el estado de ánimo, pensamientos y comportamientos.

Un estudio publicado en Molecular Psychiatry señala que ciertas variantes genéticas relacionadas con los receptores de serotonina pueden influir en la regulación emocional, aumentando la susceptibilidad a la inestabilidad emocional (Canli et al., 2006).

Factores ambientales

En el desarrollo de la inestabilidad emocional también juegan un papel importante los factores ambientales, especialmente durante la infancia y la adolescencia. Crecer en un entorno de abusos o vivir experiencias traumáticas  pueden tener graves consecuencias para la regulación emocional en la etapa adulta. Un estudio de la American Journal of Psychiatry resalta que el trauma infantil está fuertemente asociado con la dificultad para regular las emociones en la edad adulta (Teicher et al., 2016).

Abuso de sustancias

El consumo de drogas está directamente asociado a la inestabilidad emocional ya que esta clase de sustancias alteran la química del cerebro y provocan efectos secundarios como irritabilidad, ansiedad y depresión.

¿Cómo es el tratamiento para la inestabilidad emocional?

La inestabilidad emocional es un problema que las personas pueden aprender a manejar de manera adecuada gracias a un tratamiento terapéutico adaptado y especialmente enfocado en aprender técnicas de manejo de las emociones, los pensamientos y las conductas. A través de las sesiones de terapia, si es de corte cognitivo-conductual, se tratará de modificar el patrón de pensamiento-actuación comprendiendo la clase de pensamientos que provocan la inestabilidad. Por otro lado, también es importante aprender habilidades para autorregularse emocionalmente, tolerar la frustración y perseverar en los objetivos vitales de la persona. En los casos en los que se padece de ansiedad o se experimentan emociones de manera demasiado intensa, también es interesante aprender, de forma conjunta y complementaria a la terapia, técnicas de relajación y mindfulness que permitan distanciar al paciente del problema inmediato. En algunos casos también puede ser conveniente abordar el problema con medicación pautada por un psiquiatra. 

Es importante que el/la paciente sea consciente de que aprender a gestionar la inestabilidad emocional es un proceso que nunca es inmediato y que la perspectiva de mejora es a largo plazo.

Terapia personalizada para aprender a manejar la inestabilidad emocional

Como hemos visto en este articulo, la inestabilidad emocional es un problema muy complejo que requiere un abordaje personalizado para aportar a el/la paciente las herramientas necesarias para mejorar su bienestar emocional.

Como psicóloga, mi objetivo es crear durante la terapia un espacio seguro y de apoyo donde mis pacientes puedan abordar las situaciones concretas que les suponen un desafío en su día a día y pco a poco ir creando dinámicas de comportamiento y de pensamiento más equilibradas.

Si has reconocido en ti o en alguien de tu entorno cercano alguno de los síntomas de inestabilidad emocional que hemos mencionado, te animo a solicitar apoyo para poder comenzar a trabajar en este problema. Si lo deseas puedes ponerte en contacto conmigo y realizaremos una primera entrevista donde podremos abordar mejor la situación.

Referencias bibliográficas: