Inteligencia emocional: qué es y cómo desarrollarla

Vivimos en un mundo cada vez más acelerado donde además tenemos las emociones a flor de piel y las relaciones que construimos con otras personas, ya sea en lo personal o lo laboral, son esenciales. Es por ello que la inteligencia emocional se ha consolidado como una herramienta clave para poder vivir con equilibrio, empatía y bienestar. 

Pero, ¿sabes qué es exactamente la inteligencia emocional? ¿O cómo cultivarla en el día a día? En este artículo te cuento su importancia, sus fundamentos, beneficios y técnicas para desarrollarla y ponerla en práctica.

¿Qué es la inteligencia emocional? Definición y componentes clave 

La inteligencia emocional es aquella capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras emociones e interpretar y responder a las ajenas. Este concepto lo popularizó el psicólogo Daniel Goleman en su libro “Emotional Intelligence” (1995), donde habla sobre cómo las emociones tienen un papel importantísimo en nuestra toma de decisiones, relaciones y desempeño laboral y personal. 

Salovey y Mayer (1990) fueron pioneros en este campo, y según ellos, la inteligencia emocional trae consigo habilidades como la percepción emocional, la facilitación del pensamiento a través de las emociones y la regulación y comprensión emocional. 

Componentes clave de la inteligencia emocional

  • Autoconciencia. 
  • Autorregulación
  • Motivación
  • Empatía
  • Habilidades sociales

Los cinco pilares de la inteligencia emocional, según Daniel Goleman 

Daniel Goleman estructuró la inteligencia emocional en cinco pilares esenciales, que son los que permiten comprender cómo funciona esta capacidad cuando se pone en práctica. Son los mencionados anteriormente y que a continuación desarrollo. 

  1. Autoconciencia emocional. Saber qué estamos sintiendo y por qué estamos sintiéndolo. Es el primer paso para saber cómo regular nuestras emociones de manera efectiva. 
  2. Autorregulación. Control de nuestras emociones, en momentos como estrés o ansiosos, pero sin llegar a reprimirlas. 
  3. Motivación. Va más allá que objetivos externos, hablamos de nuestra capacidad interna para mantenernos optimistas y enfocados. 
  4. Empatía. La habilidad de ponerse en lugar del otro, comprender su punto de vista y responder con sensibilidad y asertividad. 
  5. Habilidades sociales. No se trata solo de comunicarse con la otra persona, sino que esta sea efectiva, comprendiéndola también. Resolución de conflictos de una manera sana y la capacidad de influir de manera positiva en los demás. 

Estos cinco pilares, además de ayudar a tener una vida emocional más saludable, también potencian nuestra resiliencia y bienestar general. 

¿Cómo impacta la inteligencia emocional en nuestras relaciones personales y profesionales?

La inteligencia emocional y ponerla en práctica, tiene un impacto directo en cómo formamos nuestras relaciones. En el ámbito personal nos permite establecer un vínculo más profundo, resolver conflictos con madurez y expresar lo que sentimos con respeto y de forma auténtica. 

En el ámbito profesional, por otro lado, muchos estudios han demostrado que tener un alto nivel de inteligencia emocional, está directamente relacionado con un mejor liderazgo, mejor desempeño laboral y satisfacción en el trabajo. Un estudio de Cavallo y Brienza (2006) realizado para la consultora internacional Hay Group, confirmaba que los líderes que tienen alta inteligencia emocional, superaban notablemente a sus iguales en áreas clave como lo son la gestión de equipos y el desarrollo del talento. 

Además de todo ello, la inteligencia emocional ayuda a reducir el estrés laboral y mejorar la toma de decisiones, ya gracias a ella se pueden procesar las emociones antes de reaccionar por impulsos. 

Estrategias efectivas para desarrollar la inteligencia emocional en tu día a día

Desarrollar la inteligencia emocional es un proceso continuo que requiere de un compromiso personal, reflexión y práctica. Algunas estrategias que pueden resultar efectivas son: 

  • Practicar atención plena o mindfulness. Ayuda a estar presente y reconocer emociones sin juzgarlas. 
  • Tener un diario personal. Escribir cómo nos estamos sintiendo y por qué. Esto puede ayudar a reconocer patrones y mejorar la autoconciencia. 
  • Aprender a pausar. Tener un momento para ti mismo antes de reaccionar a una situación, permite regular las emociones de manera más efectiva. 
  • Trabajar una escucha activa. Escuchar para comprender, no solo para responder. No interrumpir ni juzgar, mejorará nuestras habilidades empáticas. 
  • Pedir feedback. Saber cómo nos percibe el resto de personas, nos puede ayudar a mejorar nuestros  comportamientos emocionales. 

Ejercicios prácticos para mejorar la inteligencia emocional 

A continuación te propongo algunos ejercicios sencillos, pero que son muy eficaces, a la hora de fortalecer cada uno de los pilares de la inteligencia emocional.

  • Rueda de emociones. Al final del día, escribe todas las emociones que hayas sentido y cuándo. Asócialas a un color que te ayude a identificarlas más fácilmente. 
  • Técnica del semáforo. Antes de reaccionar ante una emoción intensa, imagina un semáforo, rojo (para), amarillo (piensa), verde (actúa). Esto te ayudará a evitar las reacciones impulsivas. 
  • Espejo emocional. Practica frente al espejo la identificación de tus emociones y cómo tu lenguaje corporal las expresa (tu cara, el tono o la postura) 
  • Escucha empática. Durante conversaciones, intenta repetir con tus propias palabras lo que la otra persona te ha dicho, validando su emoción. 
  • Visualización positiva. Imagínate una situación difícil y visualízate respondiendo con la mayor calma, empatía y asertividad que puedas. 

Todos estos ejercicios que puedes incluir en tu día a día y una práctica asidua de estos, pueden ayudarte a mejorar significativamente la manera en la que gestionas tus emociones y cómo te relacionas con los demás. 

Beneficios de la inteligencia emocional: ¿por qué debemos cultivarla? 

Desarrollar la inteligencia emocional tiene diversos beneficios respaldados por investigaciones científicas. Según un estudio publicado en “Personality and Individual Differences” (Schutte et al, 2007), las personas que tienen mayor inteligencia emocional, tienen también mayor nivel de bienestar, menos niveles de ansiedad y mejor calidad en sus relaciones con otras personas. 

Principales beneficios 

  • Mayor autoestima y autoaceptación 
  • Potencia la resiliencia frente a adversidades 
  • Favorece las relaciones interpersonales para que sean más sanas y empáticas 
  • Contribuye a un mejor desempeño laboral y académico 
  • Reduce el estrés y mejora la salud mental 

En resumen, la inteligencia emocional, además de mejorar nuestras emociones, transforma nuestra manera de vivir en el mundo. Gracias a ella podemos vivir con más consciencia, equilibrio y conexión con nosotros mismos y con los demás. 

¿Te gustaría trabajar en tu inteligencia emocional con apoyo profesional? Si sientes que necesitas comprender mejor las emociones que sientes, mejorar tus relaciones o gestionar emociones fuertes como el estrés o ansiedad, puedo acompañarte en el proceso. 

Pide tu cita hoy mismo y da el primer paso hacia una mejor versión de ti mismo más consciente y serena. 

Referencias bibliográficas:

  • Goleman, D (1995). Emotional Intelligence: Why It Can Matter More Than IQ. 
  • Salovey P., Mayer, J.D (1990).”Emotional Intelligence” Imagination, Cognition and Personality 
  • Cavallo, K., Brienza, D (2006) Emotional Competence and Leadership Excellence at Johnson & Johnson. Hay Group.
  • Schutte, N.S., Malouff, J.M., Thorsteinsson, E.B., Bhullar, N., Rooke, S.E (2007). “A meta-analytic investigation of the relationship between emotional intelligence and health” Personality and Individual Differences.